Por una Evaluación realmente Educativa



En la actualidad debemos concebir a la evaluación como una realidad colaborativa, todos los miembros de la comunidad educativa deben participar en todo el proceso evaluativo, ya que son promotores y receptores de la misma evaluación: tanto profesores, alumnos, padres de familia, personal administrativo y docente administrativo.  El proyecto educativo se ha forjado de manera conjunta, todos han compartido la responsabilidad de trabajar bajo una misión y visión afín, unos valores y unas metas comunes; han enfrentado las dificultades, previstas o no y han realizado los ajustes necesarios para que el proyecto continúe.
En las instituciones educativas, además de evaluar al alumno, se debe hacer lo mismo con el profesor, el desempeñado e interés demostrado por parte de los padres, el nivel de acción del personal administrativo y docente administrativo, todos desde su rol en pro de la consecución del proyecto educativo. Eso sí, bajo esta perspectiva la potestad de evaluar deberá recaer tanto en el profesor, como en los alumnos que también deben evaluar y donde tanto los padres de familia y el resto del personal de la institución deben  igualmente valorar el desempeño docente, los programa, los recursos empleados, el contexto, la infraestructura, el proyecto en general.